Utilizar la sal de mar y hierbas verdes para realizar exfoliante casero es algo muy sencillo y revitalizante. Puedes realizarlo con lo que hay a mano en tu cocina, o darte el tiempo de adquirir ingredientes cosméticos en alguna botica. En la Ciudad de México muchas personas acuden a la farmacia París, que es tradicional en surtir todo tipo de esencias a muy buen precio. Lo básico es combinar hierbas verdes, sal de mar (la gruesa), algún tipo de aceite o crema. A continuación te presento algunas recetas, desde la más sencilla hasta la más sofisticada. Puedes elaborar poquito si sólo lo vas a utilizar en tu rostro, manos o pies, o aprovechar a elaborar suficiente y emplearlo en tus duchas de cuerpo entero durante una semana, como un proceso de desintoxicación y revitalización.
Para el rostro, las manos o pies, se utiliza un poco de exfoliante sobre la piel húmeda, y se da masaje suave, se deja reposar en la piel para que a través de los poros podamos absorber los beneficios de las hierbas, y después se enjuaga con agua tibia.
En caso de utilizar en el cuerpo entero, te puedes bañar como lo haces de costumbre, y al terminar, ya con la piel húmeda, aplicas en todo el cuerpo en un masaje suave, dejas reposar en la piel para que a través de los poros podamos absorber los beneficios de las hierbas, y después se enjuaga con agua tibia.

A. Exfoliante sencillo
Utiliza la licuadora o el procesador de alimentos para «moler» la sal de mar, de forma que los cristales se rompan, y queden en un grano fino, que no vaya a lastimar tu piel.
Elige hierbas verdes, recuerda que si utilizas frescas, tendrás que guardar el producto en el refrigerador, si utilizas secas, puedes dejar el producto en un frasco tapado a temperatura ambiente. Pueden ser menta, hierbabuena, laurel, hinojo, manzanilla, etc. Toma sólo las florecitas y hojas, retira los tallos que son difíciles de triturar, o ásperos. Tritura en la licuadora o el procesador de alimentos.
Toma aceite de oliva o girasol, aceite de cocina, o aceite para bebés, o crema corporal, es decir, algún aceite o crema que tengas a la mano.
Mezcla en un recipiente dos o tres partes de sal, por una parte de hierbas, y una parte de aceite o crema. Puedes ir agregando más crema o aceite hasta que logres la textura que sea cómoda para aplicarte.
*Nota, si quieres usar cítricos en vez de hierbas verdes: Si eres fan de los cítricos, puedes usar la piel del limón, la naranja o toronja, que obtienes con un rallador para retirar la parte verde del cítrico, pero en este caso, usa el producto sólo antes de dormir y no cuando vayas a exponerte al sol. Esto es importante, los cítricos en la piel bajo el sol pueden causar manchas. Así que al despertar al día siguiente date una ducha antes de exponerte al sol y usa bloqueador solar.
B. Exfoliante Cosmético
Para la mejor calidad posible, realiza los siguientes cambios en los ingredientes, aunque utiliza el mismo procedimiento que en la receta anterior.
Utiliza Sal del Himalaya o del Mar Muerto, y tritúrala para lograr un grano fino.
Además de hierbas verdes utiliza esencia, es decir, si utilizas menta, agrega también esencia de menta. O puedes realizar combinaciones, como esencia de eucalipto y hierbas de romero.
Combina a partes iguales glicerina natural y aceite de coco natural para emulsionar los elementos.
Incorpora dos o tres partes de sal, por una de hierbas, y ve agregando el aceite de coco con glicerina, hasta lograr una textura cómoda para tu piel. Agrega aceites esenciales, mezcla bien, y guarda en un recipiente con tapa.
C. Exfoliante Cosmético para Pieles Sensibles
Si quieres los beneficios de las hierbas y las sales, pero tu piel es muy sensible, esta es la alternativa.
- Hierve el aceite de coco o el aceite de oliva, en baño Maria con las hierbas picadas. Evita cítricos o hiervas «duras» (romero, ruda), elige sólo hierbas dulces: manzanilla, hierbabuena, menta, lavanda. Revuelve constantemente, y deja reposar con la tapa puesta.
- Filtra y coloca en un nuevo recipiente, agrega un poco de glicerina natural.
- Mezcla harina de arroz con sal del Himalaya o del Mar Muerto, ya procesada para que su grano sea lo más fino posible.
- Agrega poco a poco la mezcla seca al aceite con hierbas, hasta lograr una textura suave. Incorpora un poquito de aceites esenciales, a tu elección (lavanda, flores, o menta). En tu caso, recuerda que menos es más, con dos o tres gotas bastará, porque no deseamos irritar tu piel.
Espero que te gusten estas alternativas para consentir tu piel con la energía purificadora de la sal de mar y las hierbas verdes. Deja tu experiencia en los comentarios, gracias por compartir.
Si además deseas consentir tu mente y espíritu con la meditación, te recomiendo adquirir mi libro en Meditaciones. Gracias.
Bendiciones de Amor, Gracia y Trascendencia
Espero que te haya gustado este artículo. Te agradezco un like, comentario, o compartir. También te invito a adquirir mis libros en Amazon Kindle.
Gracias.